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Con fortalecida delegación chilena parte ARCO Madrid 2012
Miércoles, 13 de febrero de 2013
La Dirección de Asuntos Culturales de la Cancillería (DIRAC) y el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (CNCA) coordinaron en conjunto la participación de los chilenos Isidora Correa, Álvaro Oyarzún y Bernardo Oyarzún en la feria de arte contemporáneo ARCO Madrid, entre el 13 y el 17 de febrero.
Realismo mágico a la chilena, irónicos comentarios del arte y la valorización de los objetos transables en el mercado son algunos de los tópicos que tratarán estos artistas, en una de las ferias más importantes del mundo.
Isidora Correa, Álvaro Oyarzún y Bernardo Oyarzún fueron seleccionados por el destacado curador Gabriel Pérez Barreiro para la sección Solo Project: Focus Latinoamérica.
La escena actual de las artes visuales chilenas se hará presente desde el 13 al 17 de febrero en la prestigiosa feria ARCO Madrid. Tres reconocidos creadores nos representarán, como parte de la sección “Solo Project: Focus Latinoamérica”, una mirada a la producción visual de nuestro continente con énfasis en las propuestas más experimentales. Allí, el conocido curador Gabriel Pérez Barreiro – una de las figuras más influyente del ámbito artístico – seleccionó a los chilenos Isidora Correa, Álvaro Oyarzún y Bernardo Oyarzún.
Este año, ARCO Madrid tiene a Turquía como País Invitado de Honor, con exhibiciones de 10 de sus galerías. Aparte, participan otras 202 salas de arte correspondientes a 30 países. En ese marco están AFA, representando a Álvaro Oyarzún y Die Ecke, representando a Isidora Correa. En tanto, Bernardo Oyarzún, va avalado por el espacio Bendana-Pinel Art Contemporain de París.
La presencia chilena en ARCO Madrid responde a una gestión conjunta de la DIRAC y el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. La exitosa participación de Voluspa Jarpa el año pasado - obteniendo el Premio illy Sustain Art por su obra “Minimal Secret” - llevó a estas instituciones a fortalecer y doblegar los esfuerzos para que nuestro país de cuenta de sus estéticas y preocupaciones artísticas en una de las ferias más importantes del mundo. En este aspecto, fue crucial el aporte de la curadora chilena Alexia Tala, quién ha orientado gran parte de su trabajo a la internacionalización del arte chileno, especialmente en instancias como ferias y bienales.
Bernardo Oyarzún mostrará en ARCO Madrid su proyecto “Cabezas Voladores”, inspirado en la mitología popular: “He estado grabando narraciones y sucesos extraños en el sur de Chile- explica- con la idea de hacer una recopilación en una serie de retratos de historias particulares, vinculadas con nuestras miradas del espacio geográfico”.
En primera persona, ante una cámara de video fija y con audio in situ, los personajes - la mayoría originarios de Chiloé- narran situaciones paranormales o fantásticas que ellos mismos han vivido, recordándonos la noción de Realismo Mágico propia de la literatura latinoamericana.
Según el artista “cada retrato será la proyección cultural de una experiencia personal inusual, una suerte de mito subjetivo, una prueba palpable de la extrañeza del espacio geográfico y del acervo antropológico con su mixtura cultural”.
Álvaro Oyarzún lleva la obra “Comunidad”, una extensa serie de dibujos sobre papeles de distintos colores. Desde cerca, se pueden ver estas micro-narraciones, cuyos personajes comentan y cuentan cosas relativas al arte y al mundo contemporáneo. De lejos, los mismos grafismos se dispersan en su mensaje, funcionando como una gran pintura abstracta, una de las “trampas al ojo” que Álvaro Oyarzún utiliza usualmente en su factura artística.
Isidora Correa mostrará el proyecto que estuvo nominado a los Premios Altazor 2012, titulado “Línea Discontinua”. En una instalación mostrará los resultados de su búsqueda urbana en los más diversos comercios de objetos importados y de producción local. Tras recorrer Santiago Centro, la zona comercial por excelencia - donde también convergen el turismo y la inmigración – la artista construyó un montaje con productos de metal, plástico, cerámica y arcilla, para poner en cuestionamiento la valorización, las transacciones y el sentido de los objetos.
