Chile participa en la XVIII Versión de Ars Electronica: Panic Yes/No

En el marco de la participación de Chile en ARS electrónica, uno de los principales festivales
austriacos realizado entre el 3 y 7 de septiembre en Linz, Austria, la Embajada de Chile visitó las instalaciones del festival y a los artistas que nos representaron como país.
Por octavo año consecutivo, y como resultado de una alianza con el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio y DIRAC de Cancillería, representantes de la escena chilena participaron de esta reconocida muestra de intersección entre arte, tecnología y sociedad. Este año, la Exposición Temática del festival: “Panic Yes/No”, problematizó el miedo y la incertidumbre de los tiempos actuales.
El Embajador Alex Wetzig visitó la exposición de los artistas Kika Echeverría y Carlos Sfeir, quienes presentaron su nuevo proyecto “Los Ecos de Prometeo”, el cual nos invitó a reflexionar sobre por qué la tecnología, antes simbolizada por el fuego como un regalo de calidez, comunidad y creatividad, se ha asociado tan a menudo con el pánico, la extracción y la destrucción, tomando como analogía el desierto de atacama. Su obra inspiró a muchos visitantes a reflexionar de forma diferente sobre la relación entre la tecnología y la humanidad.
Por su parte, la música Paula OS actuó en directo durante la programación Nightline el viernes 5 de septiembre con su obra “Image” (Imagen), del tópico “¿Puede la música salvarnos, incluso de nosotros mismos?”, dejando en alto una inmersión multidimensional como intérprete y DJ, al
encarnar el poder terapéutico de la música. A través del sonido, “Image” ilustró la naturaleza
fragmentada de la salud mental, a la vez que sugería la música como un medio para sanar y
redescubrir nuestra voz.
Asimismo, el Embajador se reunió con la Directora del Festival, Christl Baur, quien valoró la cooperación y participación constante de Chile y cómo el tema de este año permitió navegar cómo se producen y se resisten los estados de urgencia de nuestros tiempos. Con ello, el festival examinó si deberíamos estar en estado de pánico dadas las múltiples crisis que enfrenta nuestro mundo (cambio climático, agitación tecnológica, inestabilidad política), o si la sensación generalizada de alarma es meramente sensacionalismo.
Con 122.000 visitas, esta fue la edición más concurrida en la historia del festival. Durante cinco días, 1472 artistas, científicos, activistas y visionarios de 87 países, entre ellos Japón, España, China y Países Bajos, se reunieron en 19 sedes, presentando más de 684 eventos y 379 exposiciones.