Chile realiza contribución voluntaria para apoyar el trabajo de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas

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El Gobierno de Chile realizó un aporte voluntario al Fondo Fiduciario de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), con el fin de apoyar los programas de asistencia y protección que se desarrollan en el marco de la implementación del Artículo X de la Convención sobre Armas Químicas (CAQ). La contribución fue formalizada, el 2 de septiembre de 2022, por el Embajador de Chile en Países Bajos y Representante Permanente de Chile ante la OPAQ, Jaime Moscoso Valenzuela, en un encuentro que sostuvo con el Director General de la OPAQ, Fernando Arias, en la sede de la organización en La Haya.

El Embajador Moscoso afirmó: “Chile es un partidario de larga data de la OPAQ y su trabajo para lograr un mundo libre de armas químicas. Para Chile es un honor hacer un aporte al Fondo Fiduciario como muestra de su apoyo incondicional a la OPAQ”. El Director General de la OPAQ, Embajador Arias, subrayó: “Estoy muy agradecido por el apoyo del Gobierno de Chile. La contribución ayudará al trabajo de la OPAQ para mejorar las capacidades de los Estados miembros para proteger a sus poblaciones de incidentes químicos y emergencias”.

Chile es miembro activo de la OPAQ desde la entrada en vigor de la Convención sobre Armas Químicas en 1997. Chile es miembro del Consejo Ejecutivo, órgano ejecutivo de la OPAQ, encargado de promover la efectiva implementación y cumplimiento de la Convención sobre Armas Químicas, así como supervisar las actividades de la Secretaría Técnica de la Organización.

Según el artículo X de la Convención sobre Armas Químicas, los Estados miembros “tienen derecho a participar en el intercambio más completo posible de equipo, material e información científica y tecnológica sobre los medios de protección contra las armas químicas”.

Como organismo de implementación de la Convención sobre Armas Químicas, la OPAQ, con sus 193 Estados miembros, supervisa el esfuerzo global para eliminar permanentemente las armas químicas. Desde la entrada en vigor de la Convención en 1997, es el tratado de desarme más exitoso en eliminar un tipo de armas de destrucción masiva.

Más del 99% de todos los arsenales de armas químicas declarados han sido destruidos bajo la verificación de la OPAQ. Por sus amplios esfuerzos para eliminar las armas químicas, la OPAQ recibió el Premio Nobel de la Paz 2013.